A los que nos importa el cuidado del Medio Ambiente, cuando vamos por el campo y vemos una lata tirada pensamos: «¡Qué guarra es la gente!»

Luego nos acordamos de las imágenes de tortugas enganchadas en mallas de plástico agonizando en las playas, de aves muertas cuyos estómagos están llenos de piezas de basura y perdemos la fé en la Humanidad.

¿Pero quíen es «la gente»? ¿Tú eres ¨gente»? Si seguimos andando y no volvemos a ver ninguna basura por ahí tirada ¿pensamos que «la gente» ya no es tan guarra o que tal vez otra «gente» no sólo ha recogido su basura sino que también ha recogido la que otros han tirado?

Y esto nos lleva a la siguiente pregunta ¿recogiste tú la lata que viste al principio del camino?

Tenemos la tendencia a culpar a entidades más grandes que nosotros (en muchas ocasiones etéreas) de los males que nos acechan pero esto sólo nos deja en una posición de queja inútil. En este artículo te animamos a pasar a la acción.

Y para ello nos vamos a quedar con un ejemplo activo de cuidado del Medio Ambiente.

Un día un joven estudiante de Biología y vecino de Hoyo de Manzanares saca a pasear a su perro por el monte y se lo encuentra lleno de basura. Muchos otros hemos pasado por ahí antes y hemos visto la basura. Segúramente habremos pensado lo que comentábamos al principio del artículo. Incluso los más atrevidos nos planteábamos: «Un día me vengo con una bolsa y lo recojo»

Pero este joven al día siguiente se planta en ese prado con unos guantes y una bolsa de basura y comienza a recoger. Y al día siguiente vuelve, y al día siguiente vuelve a volver y así durante varias semanas. Algunos vecinos empezamos a ver que hay bolsas de basura dispuestas en algunos puntos para que los que pasamos por ahí podamos tirar nuestros desperdicios y carteles pidiendo que se cuide del entorno.

Como este joven comparte su acción en las redes sociales pronto se encuentra con que otros jóvenes y no tan jóvenes quieren unirse a su iniciativa y se organizan quedadas para los domingos ir a limpiar y luego tomarse una cervecita. Al principio son sólo unos pocos y poco a poco van siendo más.

Así la iniciativa va tomando forma, nombre e incluso imágen de marca. El joven se llama Pablo Aguado y el proyecto : Limpia Tu Casa

cuidado del medio ambiente

Pronto este proyecto empieza a colaborar con otros del mismo estilo y se van a limpiar también a otras localidades madrileñas, como os contábamos en la anterior entrada.

En seguida tendremos nuevas noticias sobre lo que este proyecto tiene en mente para continuar con su labor porque no han hecho más que empezar.

Como ves, una pequeña acción se puede convertir en un movimiento. Y si esas pequeñas acciones se multipilican, el movimiento puede ser imparable.

Es una buena idea que te unas a este tipo de iniciativas de cuidado del medio ambiente o que tú mismo las inicies pero si no quieres llegar tan lejos, tal vez puedas al menos recoger algo de lo que te encuentres por tu camino, sólo con eso, el espacion natural que visites estará mejor que cuando tú llegaste.

Por eso desde aquí te pedimos que no preguntes quién debería limpiar esto. Si está ahí y tú estás delante ¿por qué no hacer un hueco en tu bolsa de basura?